Nuestra lengua nos pertenece.
Constituye una parte importante de nuestra personalidad.
Pero sabemos que muchos individuos hablan varios idiomas.
¿Significa esto que esas personas poseen varias personalidades?
Los investigadores creen que…¡sí!
Cuando cambiamos de lengua, cambiamos también nuestra personalidad.
En otras palabras: nos comportamos de manera diferente.
Así los han concluido científicos americanos.
Estudiaron el comportamiento de mujeres bilingües.
Estas mujeres se habían criado en inglés y español.
Conocían ambos idiomas y ambas culturas igualmente bien.
A pesar de esto, o quizá por eso mismo, su comportamiento dependía del idioma.
Cuando hablaban español se mostraban más seguras.
También se sentían bien cuando a su alrededor se hablaba español.
Pero cuando tuvieron que hablar inglés, su comportamiento cambió.
Se mostraron entonces un poco menos confiadas y a menudo también inseguras.
Los científicos se dieron cuenta de que las mujeres parecían más aisladas.
El idioma que hablamos, por tanto, condiciona nuestro comportamiento.
Los investigadores no saben por qué sucede esto.
Probablemente nos orientemos en función de las normas culturales.
Al hablar, pensamos en la cultura que engloba un determinado idioma.
Esto ocurre de forma mecánica.
En otras palabras: intentamos adaptarnos a esa misma cultura.
Así que nos comportamos como suele ser habitual en cada cultura.
Los nativos chinos siempre son muy reservados en los experimentos.
Pero cuando hablan inglés se muestran más abiertos.
Tal vez modifiquemos nuestro comportamiento para integrarnos mejor.
Queremos ser, en definitiva, como aquellos con los que nos comunicamos…
¿Sabías?
El bielorruso es una lengua eslava oriental.
Es el idioma nativo de unos 8 millones de personas,
las cuales proceden de Bielorrusia,
pero también se pueden encontrar hablantes de bielorruso en Polonia.
Está estrechamente relacionado con el ruso y el ucraniano,
lo que significa que los tres son bastante similares entre ellos.
Todos ellos provienen de un ancestro común, el rus.
Son muy pocas las diferencias importantes que hay entre ellos.
Por ejemplo, la ortografía bielorrusa es estrictamente fonética.
Esto significa que la pronunciación de las palabras determina cómo se escriben.
Esta característica diferencia al bielorruso de sus lenguas hermanas.
También cuenta con muchas palabras que provienen del polaco,
algo que no sucede en el ruso.
La gramática bielorrusa es muy similar a la de otras lenguas eslavas.
Si te gusta este grupo lingüístico, entonces deberías aprender bielorruso.